20 junio 2006

Que te boten de la UCV puede ser más fácil de lo que crees... Si lo permites, ¡claro!

PARTE DE LA PROPUESTA DEL CONSEJO UNIVERSITARIO PARA “MEJORAR” EL RENDIMIENTO ESTUDIANTIL CON LÁTIGO

Artículo 8
“Todo alumno que en un período académico apruebe menos del 50% de la carga académica inscrita al inicio del período lectivo, deberá participar obligatoriamente en el programa especial de recuperación establecido en estas normas, salvo en el caso descrito en el articulo 14 de las mismas.” (EN EL ARGOT FUTBOLISTICO EN BOGA….FALTA).
Artículo 11
“El alumno que al final de un período de recuperación nuevamente apruebe menos del 50 % de la carga inscrita en el período lectivo, no podrá inscribirse en la Universidad Central de Venezuela en los dos periodos lectivos siguientes…” (TARJETA AMARILLA ¡FUERA POR UN AÑO!)
Artículo 14
“ El alumno que por tercera vez durante la carrera apruebe en un período académico menos del 50 % de la carga académica inscrita al inicio del período lectivo, no podrá inscribirse más en la misma Escuela de la Universidad Central de Venezuela ”. (TARJETA ROJA, ¡FUERA DE LA FACULTAD PARA SIEMPRE!)

UNA REFLEXIÓN NECESARIA
Si establecemos la comparación entre el Articulo 11 con el Articulo 6 del antiguo reglamento que dice: “El alumno que la final del semestre de recuperación no alcance nuevamente a aprobar el 25% de la carga académica que cursa o en todo caso aprobar por lo menos una asignatura, no podrá reinscribirse en los dos semestres siguientes”, notamos que:
1.- Se sustituyen las palabras carga académica por carga inscrita. Esto quiere decir que al final del semestre, para contabilizar este 50%, van a tomar en cuenta las materias retiradas. ¿Qué quiere decir esto?, que si inscribimos 3 materias y retiramos 1, y por mala suerte raspamos otra y pasamos una solamente, la suma de la retirada y la raspada pueden dar más del 50%. Quiere decir que caemos en norma y corremos el riesgo de ser botados o de quedar fuera si caemos en el artículo 11 y 14.
2.- El Consejo Universitario nos quiere vender esta normativa como solución al bajo rendimiento universitario y algunos estudiantes podrían estar de acuerdo con esto. La verdad es que, en el Consejo Universitario, desean deshacerse de quienes tienen problemas económicos, trabajan, hacen deporte, viven lejos, están casados o son responsables de familia, quienes realizan actividades culturales o políticas y de todos aquellos que vemos la educación más allá de los conocimientos impartidos en clase y apostamos a una formación integral.
En el fondo nos quieren convencer de que nuestra única finalidad es estudiar lo impartido en las aulas y forzarnos a no tener una vida aparte de los estudios y mucho menos la posibilidad de pensar diferente.
Adicionalmente no se ha planteado mejorar a quienes enseñan, su forma de enseñar y su manera de evaluar. Por el contrario, se ataca a “los estudiante” pues, según ellos, somos los únicos que estamos mal, lo que justifica aplicar medidas autoritarias sobre nosotros, cuando lo importante debería ser corregir las causas del mal rendimiento.
Condenamos categóricamente este reglamento por ser reaccionario, por no ir al fondo del problema y criminalizar a los estudiantes, pretendiendo castigarnos por una culpa que no es sólo nuestra sino en gran medida de los profesores y de este sistema que nos quiere convertir en un producto que se compra y se vende, donde nuestro precio de venta es la calificación y el permiso para vendernos lo firmamos con nuestro silencio.
A cinco años de la heroica toma de la sala de sesiones del Consejo Universitario... Su lucha HOY sigue vigente...


Comité por la Universidad Popular